Desde las últimas dos Copa del Mundo, Argentina ha perdido cuatro de seis partidos, dejando sin sueños a los aztecas en su objetivo de clasificar a la segunda fase.
Foto: Imago7
Redacción Unemi News.-
El duelo entre Argentina y México fue muy esperado por su importancia en la definición del grupo C de la Copa del Mundo. Esto es una obviedad. Sin embargo, también generaba gran expectativa por lo que podía suceder en las tribunas, ya que se enfrentaron dos de las hinchadas más numerosas de todas las que llegaron a Qatar. Más allá de todos los augurios, en Lusail se vivió una verdadera fiesta del fútbol, con color y gran energía.
México nunca le ha ganado a Argentina en los partidos de Copa del Mundo y tampoco ha superado un dominio argentino en los últimos 10 choques, con 7 derrotas y solo 3 empates. Ambos equipos perdieron puntos en el inicio del Grupo C. La Albiceleste cedió 2-1 ante Arabia Saudita en el primer partido, mientras que México no pudo ganarle a Polonia para firmar un empate 0-0.
El partido había nacido desde el intervencionismo de los seleccionadores, con Scaloni cambiando a la mitad de los jugadores de campo respecto al estreno, con Martino fortificándose con zaga de cinco y prescindiendo de una referencia ofensiva evidente. Enseguida se comprobó, por lo demás, que nadie haría prisioneros: Montiel estaba en casi todas, recibiendo primero, dando después, pero no era sino el espejo de un partido que se iba trabando a la espera de que alguien lo descorchara. Messi andaba pendiente de buscar la pelota para encontrarla a la que comprobó que no serían precisamente sus compañeros quienes se la acercaran.
A los 18 minutos del segundo tiempo, Leo Messi marcó el primero ante México. Una explosión única de su hinchada.
Posteriormente, llegó el segundo, un golazo total de Enzo Fernández.
Desde las últimas dos Copa del Mundo, Argentina ha perdido cuatro de seis partidos, cuestión que buscará revertir en este y a su vez comprometer a los aztecas en su objetivo de clasificar a la segunda fase. Reto que lo cumplió al ganar por 2-0 a México.